28 oct 2011

ZULRAITEN

Sucede que a veces, cuando estás sumergida en la lectura de un libro, debes parar para anotar alguna frase o algún párrafo que te consigue estremecer, que te cala hondo. Por su belleza descriptiva, por su simbolismo.

Eso me ha ocurrido a mí hace 20 páginas.

He tenido que parar para anotar la descripción de un personaje, que siendo las 13:51h de un viernes 28 de octubre del 2011, me encanta.

Y no porque yo misma tenga los ojos color marrón miel y esa evocación del desierto me haya capturado...

“Había una vez una joven a la que el sol había dotado de cabellos dorados, a la que la luna había teñido su piel de color blanco, a la que la arena había dado a sus ojos el color del desierto, su cuerpo había sido esculpido por la propia Afrodita y su alma era una extensión de la propia madre tierra.”

- Carmen María Cañamero -.


* Este fragmento quedará tatuado en mis libretas “por siempre jamás”.

2 comentarios:

Los comentarios de carácter ofensivo o spam, serán eliminados de este espacio automáticamente. Se ruega respeto y educación.