Tres palabras que me hicieron reflexionar mucho y
darme cuenta de que lo que tengo.
A veces estamos demasiado concentrados en nuestras
propias tristezas y no nos damos cuenta de las cosas buenas que la vida ha
cruzado en nuestro camino.
Este año lloraré echando de menos a alguien perdido
recientemente tan valioso, -todos los sabéis-, pero me da que también voy a
tener muchos motivos por los que sonreír.
Porque durante este año me han pasado muchas cosas
alucinantes que jamás pensé que me fueran a pasar a mí. Entre ellas:
He conocido gente muy interesante vía blog, he
recibido cartas mágicas (Poème) y detalles de personas desde la distancia que muchos quisieran
que gente de la no distancia los tendría con ellos (no sé si me he explicado bien),
he visto mi primer relato publicado -tan importante para mí-, he leído muchos
libros de los cuales he elaborado una reseña y los propios autores me han firmado
en ellas o me han dado las gracias vía email (es una enorme satisfacción que
eso ocurra, te hace sentirte útil).
He viajado a un lugar tan maravilloso como Escocia
junto a mi chico, y he conocido también a gente maravillosa que siempre
permanecerá en el recuerdo.
He conocido en persona a una alicantina de corazón
madrileño y su familia con la que me une más de un blog y el amor a un grupo
musical. Y gracias a ella a muchas personas que profesan la misma devoción a
ese grupo. La música es algo que une.
Me he sentido más unida a mi familia. Dicen que nos
unimos más en las adversidades.
Pero sobre todo, he conocido a un alma telepática,
mi amiga valenciana, que me ayuda a sonreír con sus palabras y me demuestra con
sus situaciones que tengo que madurar, que tampoco estoy tan mal, que hay gente
que vive situaciones peores que la mía y se enfrenta a todo con una sonrisa.
Ella me ha enseñado que las sonrisas valen mucho.
Tengo varios ángeles residentes en Barcelona, que en
todo momento me han hecho sentirme especial, sin ni siquiera conocerles en
persona, son tantos los detalles, que a veces los abrazos entre mundos no
bastan. Sueño con el día de poder daros un abrazo en persona y deciros ese
GRACIAS que mi corazón siente, porque a veces las palabras bonitas no son
suficientes.
Pero gracias a mi Jane Eyre, por recordarme lo
verdaderamente valioso.
Que tengo a mi familia, a un heavy melenudo al que
amo con locura y que también me ama a mí, una amiga de verdad, varios ángeles
revoloteando y algunas estrellas que con sus comentarios en mis blogs
asiduamente dan luz a mi corazón.
Nuestras primeras navidades juntas Jane Eyre. No se
me olvidará cuando se me tuerzan las sonrisas.
Me acordaré de todo lo que
tengo.
Y miraré a las estrellas en las noches más oscuras.
Tú ya sabes por qué.
Hay algo que pienso desde hace tiempo, cuando te fijas en los detalles maravillosos de tu vida, la gente que te acompaña desde cerca o en la lejanía, los paisajes inmejorables que suceden a tu alrededor, y dejas de fijarte únicamente en la tristeza que ya no tiene remedio, consigues algo vital: que tu vida se enfoque en positivo hacia todo lo que puede elevarte hacia un grado más.
ResponderEliminarEs así como conseguiste publicar tu primer relato en un libro que recorrerá el mundo...y luego otros más, lo difícil es abrir la primera puerta.
Yo también tengo algo que agradecer, que dejaras un comentario en mi blog que me permitiera llegar hasta aquí para unir nuestras letras.
Un beso
Los has explicado tan bien... que no tengo nada más que añadir.
ResponderEliminarBueno sí :D (¡Qué lástima que la risa no se oiga a través de internet! ¡No me gustan las distancias!)
Un mega abrazo telepático!!
Jo, te quiero un montón
Es reconfortante saber que las lagrimas, aparte de dejar surcos en nuestras mejillas y nuestras almas, también pueden limpiar nuestra visión de nosotros mismos.
ResponderEliminarSiempre, aún en la mas absoluta oscuridad, existirá la luz de una estrella que nos diga que no estamos solos.
Un abrazo.
Hay teorías que dicen que una sonrisa, aunque sea fingida, envía la información necesaria a nuestro sistema nervioso para liberar más endorfina (placer, tranquilidad que otros asocian a felicidad).
ResponderEliminarAsí que imagínate cuán importante es sonreír :) Estoy completamente de acuerdo con Mai jejeje.
Gracias por mencionar a mi pequeña niña tarada en tus palabras. Poéme me enseñó a mirar siempre más allá, más arriba, más profundo, al infitito... Me enseñó que no hay límites insuperables o barreras imposibles. Todo se puede conseguir, solo hay que seguir intentándolo con más ahínco.
Un abrazo ^^
Me alegra leerte así. ya había pensado en las fiestas, son fechas difíciles porque es cuando más eco hacen las sillas vacías.
ResponderEliminarTe pregunté una vez quienes eran tus estrellas, y no dudaste a la hora de responder. Eso significa que no hay huecos, están contigo. Es un buen motivo para sonreir.
Un beso