Palabras alocadas van cobrando vida mientras mis
dedos se deslizan sobre las teclas negras de un ordenador portátil cualquiera.
Hoy amanecí con fuerzas, con ganas de escribir, con
ganas de continuar esa historia que guardo muy dentro de mí.
Haciendo recuento de antiguos relatos, vuelvo a
encontrar el norte, el norte de mi tierra, mis raíces, y eso me ayuda a tener
claros mis objetivos. Mis pensamientos vuelven a colocarse donde siempre
debieron estar, mis sentimientos van agrupándose ayudando a mi corazón a latir enloquecido.
Esta obsesión por escribir no es pura obsesión es
necesidad. Una necesidad muy fuerte que siento dentro de mí y que no todos
entienden. Me hace sentirme débil algunas veces, pero en su mayoría me hace
sentirme fuerte.
Sé que escribir es lo único que soy. Es lo que
regalo de mí a los demás para que me conozcan un poco, es lo que me regalo a mí
misma para conocerme cuando me desconozco.
Me da igual si los demás no entienden esta pasión,
si creen que estoy perdiendo el tiempo, si creen que debería emplearlo en algo
mejor.
Algo que me ayuda a distraerme, que recompone los
trocitos de mi corazón doloridos, que me ayuda a evadirme, a soñar despierta, a
crear otros mundos donde siempre estoy contenta, a tener ansias de vivir, a
querer luchar por hacer mis quimeras realidad, algo que me hace encontrarme a
mí misma cuando me siento nadie, es algo que realmente merece la pena.
Al menos para mí.
Es una obsesión por practicar algo que me hace
sentirme especial, valorada.
Y al fin y al cabo soy yo la primera que se tiene
que valorar, soy yo la primera que se tiene que sentir bien en su interior,
consigo misma, para poder estar bien con los demás.
Cuántos años desperdiciados sintiéndome nadie, cuando
la respuesta a lo que yo era la tenía
tan cerca.
Cuántos relatos sin sentido hablando de la pérdida de mi yo, cuando
mi yo estaba siendo ejercitado.
Mi esencia es lo que soy. Soy cuando escribo. Yo soy
mis palabras.
Es una necesidad de hablar en silencio, de hablar
mediante la palabra escrita, es una necesidad vital porque cuando no escribo me
siento inútil, me siento muerta. Y es que cuando no escribo estoy muerta, en
vida pero muerta.
Y me da igual si hay quien no me entiende…mientras
me entienda yo misma…
¿Obsesión o necesidad?
Ambas cosas.
Obsesiva por…
Necesitada
de…
La palabra escrita.
Palabra escrita… Esencia…
Yo.
Hola, me llamo Mai y soy adicta a la palabra escrita ;)
ResponderEliminarYo lo veo como una necesidad más que como una obsesión. Me gusta ponerme delante de la hoja en blanco y que mis ideas vayan tomando cuerpo.
ResponderEliminarYo también deseo que leas la novela. Estoy nerviosa porque cómo la aceptará la gente. Es mostrar algo muy íntimo de mí y me produce algo de ansiedad.
¿Obsesión o necesidad?, creo que en esto de escribir van parejas. No importa tanto quien gane, importa competir ;)
ResponderEliminarSaludos
Te entiendo demasiado bien. La palabra es pensamiento (aun siendo a veces inconsciente no deja de ser pensada) y el pensamiento es lo que somos, lo que nos hace únicos en este mundo plagado de seres humanos idénticos entre sí.
ResponderEliminar"Pienso, luego existo" decía Descartes... Pienso (en palabras), luego existo.